🏀DOBLARSE UN TOBILLO EN LA PRÁCTICA DEPORTIVA.
Cuando un atleta se dobla un tobillo puede que sufra un esguince y lo primero que se recomienda es aplicar hielo para bajar la inflamación.
La inflamación, es un mecanismo de defensa que tiene nuestro organismo, es la forma de manifestarse de muchas enfermedades. Si existe inflamación significa que hay un problema, el cual se debe resolver; si solo se trata de desinflamar con hielo o medicamentos antiinflamatorios se podría decir que se está escondiendo el síntoma y la lesión del tobillo en este ejemplo continúa.
Para que se dé una inflamación se necesita, de vasos capilares o tejido conectivo vascularizado, de esa forma le llegará sangre con oxígeno y nutrientes al tejido dañado, es por esa vía sanguínea que la inflamación ante una lesión crece, volviendo la zona caliente. Esa forma de actuar del organismo permite una vasodilatación permanente o que los vasos sanguíneos se abran a su máxima capacidad.
Entonces, la inflamación ocurre con el fin defensivo de aislar, destruir al agente dañino y reparar el tejido u órgano dañado. Se considera por tanto un mecanismo de inmunidad innata.
El sistema inmunitario, se pone alerta, entra en acción con todo lo que tiene en busca de agentes biológicos como las bacterias, los virus, los parásitos, los hongos, usando unos receptores tipo Toll para encontrar los invasores y destruirlos para conseguir la salud.
Si tenemos una lesión como un esguince de un tobillo, lo primero que va pasar es que éste se inflame; la recomendación médica es la aplicación de hielo para evitar la vaso dilatación, pero evitar la vaso dilatación (que los vasos sanguíneos se abran), sería hacer una vaso constricción (que los vasos sanguíneos se cierren), si estos se cierran, evitarán que el sistema inmunitario o las defensas vengan a destruir el agente dañino, parando la reparación del ligamento y los tendones del estiramiento excesivo que los dañó.
Después de aplicar hielo se recomienda la toma de antiinflamatorios, ambos hielo y pastillas bajarán la inflamación, deshidratando el tejido; ésta deshidratación hará que la articulación se pueda mover, pero sigue rota, no hubo regeneración.
Sin dolor y con movilidad la persona lesionada piensa que está curada; reinicia su práctica deportiva habitual lesionado. Es por esa razón que deportistas utilicen antiinflamatorios para correr, jugar baloncesto, fútbol y otros deportes estando lesionados.
Ahora sin dolor, van haciendo daño peor mientras practica el deporte.
Si observamos la medicina tradicional china, un médico chino nunca usaría hielo, para ellos el frío es yin que significa quietud, por el contrario, lo que se busca es un movimiento que vendría a ser la parte yang.
Sin hielo o antiinflamatorios el cuerpo puede trabajar reparando el tejido dañado; el hielo hará una vaso constricción evitando la entrada de agentes inflamatorios, pero también disminuirá la cantidad de oxígeno y nutrientes, significa que el cuerpo no va a trabajar para reparar el tejido.
Una lesión provoca una inflamación que envía información al cerebro, éste le pide al páncreas mayor producción de insulina, encargada de volver más permeable la célula, para que esté dispuesta o abierta a recibir energía en el caso de las personas que comen carbohidratos, las que no consumen carbohidratos no disparan la insulina porque son quemadoras de grasa regenerando hasta un 60% más rápido las lesiones. El cuerpo empieza a quemar calorías para restaurar el tejido dañado, consiguiendo suficiente energía de la grasa almacenada adaptándose ante el estrés traumático.
Ya la célula dispuesta a recibir energía por el aumento de insulina en los que consumen carbohidratos la vuelve permeable a mayor uso de nutrientes enfocados hacia la reparación.
El organismo pone en marcha a todo su arsenal para empezar a reparar los tejidos. La inflamación está ahí para realizar la función de reparar los tejidos. Una vez reparados vuelve el equilibrio para devolver la movilidad, si la movilidad no vuelve significa que el tobillo continua lesionado y hay que revisar la causa de dicha inflamación que no es aplicando hielo o tomando antiinflamatorios.
Sin embargo, no siempre es así, el problema que surge de la inflamación es que los agentes defensivos se dirijan, tanto hacia elementos dañinos como a los no dañinos, de manera que provoque lesión en tejidos u órganos sanos. Cuando la inflamación es tan fuerte por agentes como ácido úrico, venenos, toxinas, alteraciones inmunitarias como hipersensibilidad o las autoinmunes, donde el cuerpo no reconoce su propio organismo, como la artritis reumatoidea.
Las prostaglandinas, intervienen en la vasodilatación para permitir el paso de leucocitos o glóbulos blancos (defensa del cuerpo), antiagregante plaquetario (no puede coagular, solo sangra), estimulación de las terminaciones nerviosas del dolor (histamina, quinina), aumento de la secreción de mucus gástrico y disminución de la secreción de ácido gástrico. Sin embargo, mucha presencia de prostaglandinas hace trabajar sobre manera al riñón.
Si el riñón trabaja demasiado por presencia de prostaglandinas, éstas pueden tener un efecto sobre la resistencia vascular cortical renal, dando como resultado un aumento del flujo sanguíneo y la presión hará aumento del volumen intracelular, disminuyendo la resistencia periférica, quiere decir, que la filtración glomerular será deficiente y habrá presencia de sangre en la orina, se da un síndrome nefrótico; que el riñón que es un filtrador tiene un daño, como si un colador tuviera un hueco más grande a los que usa para colar, dejando pasar la nata de la leche, por ejemplo.
Un síndrome nefrótico por tanta presencia de prostaglandinas por existir tanta inflamación, si el daño es más o menos grave, pueden surgir complicaciones en otros órganos y sistemas.
En conclusión ante un esguince de tobillo, se debe descansar para permitir al cuerpo reparar las estructuras dañadas, luego se le debe dar una rehabilitación con pesas para trabajar la musculatura de la pierna incluyendo los gastrocnemios, los tibiales y los peroneos; un ajuste del tobillo podría ser necesario y hasta crear una pequeña nueva inflamación para que la lesión crónica se vuelva aguda y esa inflamación controlada permita la entrada de nutrientes para regenerar, ya sea con un masaje profundo o la utilización de ventosas rojas donde se aplica la ventosa, pero la piel se punza con una aguja para que sangre.
Por cultura occidental lo que se recomienda es dejar la inflamación unos 4 días para que haga su reparación, luego si persiste, utilizar hielo en agua para meter el tobillo o aplicar compresas frías 20 minutos cada 2 horas por 5 días, tomar antiinflamatorios, por 5 días, ya sea cada 24 horas, 12 horas u 8 horas dependiendo de la prescripción médica, en otras personas un antiinflamatorio homeopático como el árnica, bryonia, belladona y otros puede ser una excelente opción.
Las personas que no comen carbohidratos no requieren de hielo, ni antiinflamatorios porque al no consumir azúcar el cuerpo bajará hasta 16 factores de inflamación.